Dubrovnik; la ciudad de los gatos

Placa-Stradun   Dubrovnik

Un gatito con la colada hecha

El puerto de Dubrovnik

Placa-Stradun

Desde mi ventana

Katedrala

Hello Kitty

Trombón de orquesta

Una foto en la que salgo yo!!!

Gatito con sueño

Me he levantado en mi habitación de Dubrovnick. Al final no he conseguido Couchsurfing aquí porque Duje vive a 100 kilómetros. El lunes me voy para Ploce, su ciudad, y ya quedo con él. Dubrovnick es Fuengirola. Está lleno de ancianos que vienen en cruceros a pasar un día. Por lo tanto, van en hordas de 20 o 30 viendo todo muy rápido. También hay bastantes chavales y  chavalas. Jovenzuelos en viajes de fin de curso o algo así, imagino. Así que tras no querer andar más y regatear una habitación de 280 kunas la noche y dejarla en 120 me he quedado. No es demasiado barato, pero está al ladito de la muralla y del Grad (la zona centro) y aquí las cuestas para hacerlas con macuto se me estaban haciendo inmensas. Tengo unas vistas para levantarme por la mañana que son espectaculares por 17€ la noche. La ciudad no es barata, pero solo me quedo aquí hasta el lunes, así que...

El idioma es raro. Incomprensible en su mayoría. “hola” se pronuncia “ala” y adiós de dice “adio”, así que hasta ahí es muy sencillo. Gracias de dice “decuala” fonéticamente. Y hasta ahí he llegado hoy. Aunque me han dicho que “adio” es local, de Dubrovnick. Que en croata se dice de otra forma que no he pillado. Luego lo buscaré en internet.

Ahora estoy motivadísimo con escribir, ya veremos dentro de un tiempo, pero yo creo que seguiré igual. Con ganas de contar todo lo que hago. Igual que cuando estaba allí, que siempre estaba contando batallitas. Esta ciudad está llena de gatos. Por todos lados y super mansos y fotogénicos.

Arquitectónicamente Dubrovnick es flipante. Es un antiguo bastión-puerto. Fue enclave estratégico de comercio, segundo más importante de Venecia hasta la entrada de Napoleón. Y siempre fue Independiente también hasta la entrada de Napoleón. La parte del Grad, que es toda la parte intramuralla de la ciudad es como volver a hace dos siglos. He estado en la “Katedrala”, en el Palacio del Rector (rector es como duque o algo así) y en el Museo Marítimo. Todo bastante guapo.

Cuando he salido del Museo Marítimo pretendía irme a casa, para escribir preparar las fotos y luego irme a un bar con internet, que hay bastantes. Pero me he encontrado con una especie de concurso de orquestas de música. Aunque era extraño. Tenían un solo director para todas y tocaban todas a la vez. Y cada una iba vestida de una manera. Así que era como el Gran Prix, con el Maestro Leiva de director de orquesta, pero todos tocaban conjuntamente. Me he quedado un rato disfrutando de la musiquita. Ahhh, y se me olvidaba… esta mañana he estado en la playita!!! Una playita de piedras y que dando dos pasos ya no hacía pie. Y, para que luego digan, el agua del Mediterráneo aquí olas no tendrá, pero está fresca que te cagas.

Ahora me piro a mirar los buses de mañana a casa del notas este del Couchsurfirng y a mandar algún que otro mail.Y por favor, firmad los comentarios que hagáis. que no os dé miedo. Estoy lejos como para pegaros OS QUIERO!!!